¡Feliz Año 1610!

 

 

    Hace 414 ańos Galileo Galilei rompió el cielo e inició una de revolución científica y cultural clave en la historia de la Humanidad. En la noche del 7 de enero de 1610 apuntó a Júpiter con su mejor telescopio y descubrió tres puntos luminosos en la cercanía del planeta. Estos tres puntos estaban alineados casi exactamente en línea recta. Sus observaciones se continuaron noche tras noche, hasta el 13 de enero, en la que detectó un cuarto punto luminoso. Los cuatro puntos se mantenían casi en línea recta como desde el primer día en que los observó. Galileo había descubierto que no todos los cuerpos celestes orbitaban en torno a la Tierra como se suponía hasta entonces. Las cuatro lunas observadas por Galileo son Calisto, Io, Europa y Ganímedes, hoy dia conocidas como lunas galileanas. Si bien el número de lunas o satélites que orbitan Júpiter no para de aumentar, se estima que ascienden a unas 92, las hoy llamadas lunas galileanas son las cuatro mas grandes que orbitan al gigante bueno. Esta cuatro lunas, dignas del mayor de los planetas de nuestro Sistema Solar por su tamaños, serían visibles a simple vista, si no fuesen opacadas por la luminosidad de Júpiter. El hallazgo de Galilelo es en definitiva, el nacimiento de la ciencia instrumental tal como la conocemos hoy día: sin su auxilio es imposible observar estos cuerpos celestes.

    En marzo de 1610 Galilelo comunicaba sus resultados en un pequeño 'paper' denominado Siderius Nuncius:

 

    Galileo Galilei hizo nacer la ciencia moderna, la que basa sus descubrimientos en observaciones y mediciones, la ciencia que cuestiona dogmas y creencias centenarios cuestionando incluso el sentido común. Cuando Johannes Kepler tomó conocimiento del hallazgo de Galileo acuñó el término satélite para referirse a los nuevos cuerpos celestes observados. Lo que ninguno de los dos jamás hubiese imaginado es que desde 1957 hasta nuestros días la Humanidad aumentó la cantidad de satélites existentes, primero terrestres, y luego en prácticamente en todo el Sistema Solar. El descubrimiento causó todo tipo de respuestas, incluso un intento de robo de su descubrimiento. El astrónomo alemán Simon Marius se quiso adjudicar el avistamiento de las cuatro lunas antes que lo reportado por Galileo, pero no tuvo suerte. Sin embargo a pesar de esa oscura tentación tuvo a bien en bautizar a los nuevos satélites descubiertos y poder sumar su granito de arena a los descubrimientos que conmovieron al mundo.

Esta es la ubicación exacta de las lunas galileanas en momentos de escribir estas líneas, no según Galileo claro está, sino según información provista por Wolfram|Alpha.-

 

    La foto de portada es un formidable homenaje a Galileo y a su hallazgo de hace cuatro siglos. Se trata de la imagen de las lunas galileanas hoy día vistas nada menos que de la mismísima órbita de Júpiter. De izquierda a derecha se observa a Ganímedes, Io, Europa y Calisto captadas recientemente por la sonda Juno durante el perijovio 57 en torno al planeta gaseoso. Hay un pequeño 'truco de cámara': la presencia de Ganímedes proviene de otra imagen similar, porque el angular de la cámara principal de Juno no captaba a las cuatro lunas y Júpiter. Punto para Galileo que si pudo hacerlo hace cuatro siglos atrás. Gracias a misiones como la reciente de Juno o la del histórico Hubble, podemos conocer mejor a un planeta clave de nuestro Sistema Solar y el surgimiento de la vida en nuestro Planeta.

 

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    Esta beve nota es una bienvenida a este nuevo año y a invitarte a seguir Zemiorka. El año pasado introduje unos pequeños cambios en el blog, como ser su fuente, diseño, o la posibilidad de suscribirse por email via Substack. Pero la mas importante sin dudas fue el haber retomado las publicaciones, a pesar de que debo alguna que otra reseña que espero poder realizar en breve. Te mando un enorme abrazo y espero poder leernos en este 2024.

 

    El crédito del retrato actual de las lunas galileanas es de Kevin Gill en base a imágenes de la misión Juno.