No Hay Como los Viejos Métodos.-

Regularmente sigo las actividades de la Estación Espacial Internacional mediante diferentes recursos: sigo su rastro online desde mi casilla de correo electrónico, la reconstruyo paso a paso cronológicamente (les recomiendo este excelente link) o bien me informo en forma abundante en el blog de Daniel Marín. Hoy sin embargo quiero comentar algo intransferible y realmente emocionante que me sucedió el sábado pasado a altas horas de la madrugada: concretamente eran las 5 menos diez de la madrugada cuando antes de acostarme miro hacia el cielo espectacular de Montevideo. Constato que hacia el sur se encontraba lo que parecía ser una estrella en movimiento. Efectivamente compruebo de que se trataba de un cuerpo celeste de origen artificial: muy brillante, destacaba del resto de las estrellas por su brillo y color del mismo (luminosidad blanca), destellaba en forma variable, y lo que es más importante se desplazaba de oeste a este con una inclinación hacia el norte. Ayer comuniqué la casual observación a la Asociación de Aficionados a la Astronomía de Uruguay y confirmaban lo correcto de mi observación. Esto último reforzó mi ingenua satisfacción. Realmente no se puede pedir mas en estos casos, verdad?.